jueves, 10 de enero de 2013

APELLIDOS CON ORIGEN JUDIO, en ESPAÑA, ARGENTINA, PORTUGAL, BRASIL, etc


Ha quedado demostrado por la Historia, que el pueblo judío ya estaba en la Península Ibérica allá por el siglo 1º D.C., y que se extendió por toda España y Portugal. De ellos procedemos nosotros ya que adoptando nuestros lenguajes crearon apellidos españoles y portugueses.

Hace 2000 años que los judíos, presos, esclavos de los romanos, llegaron a Sefarad (España). Posiblemente, entraron por el cabo gallego de Finisterre, que en latín significa Fin de la Tierra. En Galicia, se asentaron raíces de judíos sefarditas y de otros que se instalaron en otros países.

"...y los cautivos de esta hueste de los hijos de Israel, los que están entre los cananeos hasta Tzarfat y la cautividad de Jerusalem, que está en S'farad (Sefarad)." (Abdias I:20).

Los judíos llevados a Babilonia, Mesopotamia, fueron traídos a España y le dieron el nombre de Sefarad, del que se dice que significa lejísimo. Aquí, todos, seguidores de Cristo, o de la Ley de Moisés, se organizaron bajo el mandato romano realizando y colaborando con ellos en importantes trabajos y en sus principales proyectos.

Cuando llegaron los visigodos, ya bastantes judíos comenzaron a renegar de su fe judía y convertirse al catolicismo por interés de posición social o de otro tipo. Se dice que los sefarditas son descendientes de la tribu de Judá y de la de Leví, y otros judíos, de diferentes tribus, como los asquenazíes, centroeuropeos, se asentaron en Alemania, Polonia, Rumania y otras partes de Europa. Hubo un momento en que la mitad de la población judía en Europa era sefardí.

El esplendor judío alcanza su cima en el siglo XII, y empieza su decadencia en el XIV. Ya en 1391 las grandes matanzas, persecuciones y conversiones por amenazas de los gobiernos y de la Iglesia Católica son terroríficas, entre las más destacadas de las matanzas se encuentra la llevada a cabo el 6 de junio de 1391 en la Judería de Sevilla.

Se ha dicho que procedemos mayormente de árabes, y eso no es totalmente cierto. La historia de España está "acomodada" por antijudíos, antisemitas redomados, desde los Reyes Católicos hasta nuestros días, y esa educación falsa se sigue dando a la juventud en centros de enseñanza por seguidores del credo cristiano o por intereses partidistas, moda, etc., donde se olvida la importancia que tuvo la sangre judía, con una presencia superior a los VII siglos en Sefarad más que la islámica, por ejemplo.

En la Edad Media, damas de alcurnia entregaban su virginal azucena y entrepierna a judíos ricos, cumpliendo así el refrán "Junta dinero y nobleza y obtendrás buena pareja", como dice Pere Bonnin en su libro Sangre Judía.

El pueblo judío, siempre errante, encontró moradas huyendo de la Inquisición en muchos países europeos, tomando al llegar allí nombres de acuerdo con su política de apellidos, otros siguieron con su apellido hebreo.

Al ser un pueblo errante creaban apellidos, Palomo en español, Colombo en Italiano, Shalom en hebreo, Salom en español.

Mucho de lo que se dice en diccionarios de apellidos es obra de escritores que no saben historia judía ni de la Inquisición y no quieren, o no les interesa, decir que son judíos.

Esos judíos sefarditas nos dejaron una gran lista de apellidos, quizá mas de 10.000, normales, pero muchos se quitaron el nombre judío como Abraham e Isaac, por ejemplo, para no irritar a los no judíos y levantar sospechas ante la Inquisición.

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