El vino de Betazos es el mismo que el de Esmelle, para empezar, y sin tener la más remota idea de si la branco lexítimo es una uva tan buena como dicen los que la trabajan, no tengo la menor duda de que poder, si se quiere, se puede.
Vayamos a un escenario normal y corriente: el CEO de Hijos de Rivera, flamante copropietario del Rácing, tiene muchos intereses en el sector primario gallego y, todavía más, en sus pasos al secundario y al terciario. Prueba de ello es que ya posee plantaciones de lúpulo, manzana, trigo y maíz, vinos, sidras, muchísimas cervezas, ginebras, vermús.. y además es de por aquí, y eso cuenta más de lo que creemos.
El betanceirismo es, en realidad, el problema: los vinos de la Picha de Pagos de Brigante no están en Betanzos, sino en Paderne (esa Mesopotamia gallega entre el Mandeo y el Lambre que produce té desde hace tiempo).
A diario, todos los que utilizan la autopista de pago (gracias, amigo Ansar) ven una loma al cruzar el Mandeo arriba a la derecha: sí, esa elevación corresponde a San Pantaleón das Viñas, que rodea al pazo de Montecelo, parroquia a la que suponemos bautizaron así por algo relacionado con el vino, llamadme loco.
Los caneiros, casi nadie lo que quiere saber, tiene su origen en el traslado de los toneles de vino desde Betazos hasta el mar; cuando los hermanos García Naveiras se convirtieron en los benefactores de la ciudad, en Betanzos llevaban como ocho siglos cuidando viñedos y elaborando caldos que se bajaban por el río porque los barcos no tenían calado para atracar en esos muelles fluviales que tanta importancia habían tenido en la Edad Media para la ciudad de los caballeros.
Las rías altas, todas, no estaban pobladas en absoluto por abstemios: había vino en todas partes, hasta el punto de que existe una variedad de uva autóctona llamada Ferrol, que no es originaria ni de Yakarta ni de Viena, con casi total seguridad. Todo esto me hace desenroscarme la boina, no sin esfuerzo, y volver a desear muy fuerte que se plantes robles muy juntitos, que se fabriquen duelas para hacer toneles, que en esos toneles maduren los vinos de nuestros viñedos y que los peregrinos del Camino Inglés se achispen cada noche con los caldos de la Denominación de origen Rías Altas, o mejor aún Tierras de Traba, lo que mutará nuestro paiseja apoeucalíptico desde Valdoviño hasta Sobrado dos Monxes, por lo menos, en un paisaje humano y cristiano que nos devuelva a nuestra prosperidad de antaño.
Y luego está lo de las habas y el requesón, que aquí siempre hemos sido la leche, y todo eso unido a nuestros panes y peces, esos que multiplicó nuestro Señor porque hacían falta... ¿Y vamos nosotros a ser menos generosos teniendo tan bueno y en tanta abundancia? Pues qué queréis que os diga: si es que lo tenemos todo, sólo que no queremos ver que a ese peregrino que ha viajado a los largo y ancho de Culismundi, le ponemos de entrante todo eso que extraen nuestras cofradías, de plato principal una rubia gallega en cualquiera de sus elaboraciones, de postre esos requeixos con la miel de la Capela y lo regamos con esos vinos de la Picha, y tenemos todo ganado para la eternidad, sin descuidar nada de lo demás que tan bien hacemos, como esa tortilla para la que no nos faltan huevos, sean o no de gallina de Mos.
Pero es mejor vender que van a venir unos chinos a hacer neumáticos, que suena muy globalista y muy kilómetro cero, que hay que ser imbécil para vender que no vamos a tener coche y a la vez contarnos que el futuro pasa por inventar la rueda de un derivado del petróleo, pudiendo generar un valor añadido de tal riqueza que volvería a poner los dominios de la Casa de Traba en donde estuvieron en los siglos XII y XIII.
Y otro día, hablamos del Novoa Santos, que ya veréis qué buen plan, pero hoy no, que es el el Día del Señor, y lo que toca es alabarlo y dominar la tierra, amansando el paisaje con nuestras uvas de aquí, que de árboles australianos vamos cheos, y tampoco es que necesitemos tanta celulosa ahora que los megas están sustituyendo al papel.
PD: Qué bonito el tren del vino, desde Ferrol a Sobrado, por tierras de los Andrade y los pagos de Betanzos.
BRANDONI.
Facebook. Ferrol.
Mira hablan de los Rivera, los Naveiras y los Traba, sobre bebidas y vinos... Je je 👆.
Los Rivera de Puentes de García Rodríguez, Naveiras indiano benefactor de Betanzos de los Caballeros y los Traba que se llevaron las semillas de uvas de Galicia a Haza.
O sarmientos más rápido que la semilla de la vid.
Rivera fundador de la Estrella de Galicia.
La familia gallega Traba o Trava eran los Condes de Lemos, Orense, de Sarria, Lugo, y de Trastámara, Tras Tameris. = más allá del Río Tambre, que transcurre enteramente por la provincia de La Coruña, siendo conocidos por ello como los Condes de Traba.
Aunque el título de Trastámara era más importante no solían usarlo.
Vivieron en siglos IX, X, XI, XII y XIII, y luego con el hermano bastardo y asesino de Pedro I El Cruel, no tan cruel, Enrique II de Castilla, le arrebató el trono, juego de tronos, y era hijo del Rey de Castilla Alfonso XI y de su amante Leonor de Guzmán, de tan noble linaje, de alta cuna y baja cama, se inició la dinastía española de los Trastámara que llegó hasta Juana I de Castilla, La Loca, no tan loca.
Pues bien en el siglo XII la Santa Juana Garcés Bermúdez de Trastámara casada con El Venerable Félix de Guzmán Señor de Caleruega padres del Venerable Antonio, el Beato Manés y del Santo Domingo de Guzmán, ella hija de los Condes de Haza o Aza, plantó en las lindes de la fortaleza o castillo, 10.000 cepas con su bodega en cueva bajo el escudo primigenio de los Arnáiz, que eran de la familia de los Guzmán, y en el siglo XIX Francisco Javier Arnáiz del Olmo, hijo de Marcos María Arnáiz Arnáiz prestigioso arquitecto de Burgos, fundó el poblado de Haza Nueva Arnáiz, Haza Arnáiz o simplemente Arnáiz, con fábricas, viñedos etc dando trabajo a todos los de Haza con viviendas, parroquia etc, llegando a tener un millón de cepas del hoy vino de Ribera del Duero Arnáiz y Mayor de Castilla y últimamente un verdejo. Comercializado en siglo XX por Vinos de Familia García Carrión.
En la botella y corcho del tinto Arnáiz lleva el León del escudo de los Arnáiz, de la familia.
Marcos Arnáiz Arnáiz es el ascendente del Santo Rafael Arnáiz Barón, que por los Barón grandes de España, entroncados también con los RRCC, son familia de San Francisco de Borja, Santa Teresa de Jesús de Ávila y de San Luís de Gonzaga.
Fernando de Arnáiz Núñez
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