El último viaje del submarino Peral - YouTube
Una grúa de 250 toneladas ha sido la encargada de izar el submarino, que pesa 30 toneladas y mide 22 metros de eslora y 2,71de manga, operación muy delicada dada la corrosión que presenta el casco.
El sumergible ha sido depositado en un camión dotado con una góngola especial de transporte que le ha llevado por las calles cartageneras hasta el Arsenal.
La entrada a una nave del Museo Naval que ha sido habilitada para albergar el sumergible ha sido calculada milimétricamente.
No obstante, la operación más complicada ha sido bajar el submarino desde la góndola para situarlo en la cama donde quedará expuesto.
Para ello se han utilizado dos grúas especiales, dadas la reducidas dimensiones de la puerta de entrada y la altura de la nave, de unos diez metros.
El submarino de Peral fue botado en 1888 y estuvo olvidado cuarenta años en el gaditano arsenal militar de La Carraca, hasta que en 1929, el primer comandante del arma submarina española logró recuperar el casco y remorcalo a Cartagena, instalándose en 1930 en tierra frente a la base de submarinos, tras retocarse su obra viva.
En 1965, el Ayuntamiento de Cartagena pide que sea trasladado a la plaza de los Héroes de Cavite para disfrute popular. En 1992 fue cedido temporalmente al pabellón de la región de Murcia en la exposición universal de Sevilla.
Desde agosto de 2002 el submarino permanecía en su último emplazamiento, entre el Museo de Arqueología Subacuática y la Cámara de Comercio..
La exposición al aire libre del 'Isaac Peral' ha dañado el casco y su estructura, muy deteriorada por la corrosión es lo que ha llevado a la Armada y al Museo Naval para proponer su traslado a un emplazamiento que permitiera su exposición y correcta conservación.
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