Jim Croce, el camionero que escribió la más bella canción de amor. Por Rafael Gómez de Marcos
RAFAEL GÓMEZ DE MARCOS
Componía sus canciones mientras trabajaba como camionero recorriendo miles de kilómetros por las carreteras de Norteamérica, sus letras nos hablaban de los tipos con los que se encontraba en los bares, las cantinas o las calles de cualquier ciudad por la que pasaba. Un buscavidas de la música, que probó suerte en Nueva York durante una temporada, que se pateó toda la Costa Este dando conciertos, y que acabó cansado y arruinado, volviendo a su hogar y a su trabajo de conductor de camiones.
En 1970 conoció al músico Maury Muehleisen, la química surge entre ellos hace que decidan formar un dúo y salir de nuevo a la carretera. Maury le acompaña con su guitarra y le ayuda a refinar su estilo. Con motivo del anuncio que le hace su mujer Ingrid, de que esperaban un hijo, Compone “Time in a bottle” una de las canciones más bellas de amor que se han escrito jamás, en la que le cuenta a su hijo todas las cosas que guardaría si pudiera guardar el tiempo en una botella, todo un presentimiento, como si supiera que le quedaba poco de vida, un tema que todavía hoy suena frecuentemente en las emisoras de radio de rock clásico americanas.
El 20 de septiembre de 1973 después de una actuación su avioneta despegó rumbo a Texas, la noche era clara y la visibilidad buena, no hacía viento, pero la avioneta se estrelló contra un árbol que había unos metros más allá de la pista. A las 24 horas de su muerte, el 21 de septiembre, se puso a la venta el single de adelanto de aquel disco, “I Got A Name”, un tema recuperado por Tarantino para la BSO de “Django Unchained”.
Un triste final para un hombre bueno que persiguió sus sueños y que intentó hacer de este mundo algo mejor de como él encontró. Una de las mejores voces masculinas de la música popular americana, si no la mejor, su nombre artístico Jim Croce. No era Bob Dylan, no era Leonard Cohen, pero tenía acordes, versos y sonoridades de ambos, como las tenía también de Gordon Lightfoot, Donovan, Pete Seeger y Woody Guthrie.
El tiempo en una botella
Si pudiera guardar el tiempo en una botella,
lo primero que me gustaría hacer,
es guardar cada uno de los días,
hasta que la eternidad pase de largo,
solamente para pasarlos contigo.
Si pudiera hacer que los días durasen para siempre,
si las palabras pudieran hacer realidad los deseos,
guardaría cada uno de los días como un tesoro
y luego, otra vez, los pasaría contigo.
Pero parece que nunca hay suficiente tiempo,
para hacer las cosas que quieres hacer,
una vez que sabes cuáles son.
He mirado lo suficiente alrededor como para saber,
que eres tú con quien quiero pasar mi vida
(ir a través del tiempo).
Si tuviera una caja para guardar los deseos
y sueños que nunca se hicieron realidad,
la caja estaría vacía, excepto por el recuerdo,
de cómo los hiciste realidad (de cómo respondiste).
Pero parece que nunca hay suficiente tiempo,
para hacer las cosas que quieres hacer,
una vez que sabes cuáles son.
He mirado lo suficiente alrededor como para saber,
que eres tú con quien quiero pasar mi vida
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