Diario de guerra: bombardeos en todo el país. Ucrania.

NEWSLETTER AHORA EN LA VOZ Apúntate 01 de marzo del 2022 Un convoy ruso de 60 kilómetros se dirige a Kiev  por PAULA AVENDAÑO La intensidad del ataque de Rusia a Ucrania está camino de aumentar. Así lo trasladaron los servicios de inteligencia de Estados Unidos esta misma madrugada. Horas después, las imágenes de un satélite captaron un convoy militar ruso de 64 kilómetros que avanzaba directo hacia Kiev. Lejos de allí, en Járkov, la segunda ciudad más grande del país, un intenso bombardeo ha sacudido importantes infraestructuras civiles. Las negociaciones celebradas ayer en Bielorrusia entre los gobiernos implicados no han servido de nada. La nueva cita tendrá lugar en unos días. Por ahora, Moscú exige que Ucrania reconozca la soberanía rusa de Crimea, la desnazificación del país y que se olvide de entrar en la OTAN. El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha comparecido hoy en el Parlamento Europeo para pedir de nuevo la inclusión de su país en la UE: «Sin ustedes, Ucrania estará sola». Por su parte, Charles Michael, que preside el Consejo Europeo, le ha prometido que examinarán seriamente su petición, pero ha adelantado que será un debate «difícil».   El armamento nuclear de Moscú Rusia ha pedido a Estados Unidos que «retire sus armas nucleares de Europa». Lo cierto es que el propio Kremlin acapara casi la mitad del arsenal atómico mundial, cifrado en 12.700 cabezas, mientras que Washington mantiene el predominio en cuanto a armas desplegadas.  Las medidas económicas para presionar a Putin se incrementan, a pesar de que algunos magnates afectados se rebelan. Cientos de empresas occidentales han decidido cortar lazos comerciales con Rusia. Las últimas en hacerlo son dos compañías clave para la economía rusa: la naviera danesa Maersk, un gigante del transporte marítimo, y la petrolera holandesa Shell, que participa en un importante gasoducto que construye Moscú. Y mientras tanto, el drama humano continúa. Acnur eleva a 660.000 los refugiados ucranianos que han huido del conflicto. Quien todavía sigue en Ucrania es José María Moreno, un policía nacional que se encuentra atrapado junto a su mujer en la ciudad de Odesa: «Resulta prácticamente imposible llegar a la frontera». Las esperas para cruzar a Polonia, donde muchos se refugian, pueden ser de hasta cinco días.   Descubre SUMA VOZ, el club de sucriptores de La Voz de Galicia. Disfruta de ventajas exclusivas y de grandes descuentos en más de 400 marcas y establecimientos. más información en www.lavozdegalicia.es